8 sept 2006

Instrucciones para fumar un puro

Un ritual
Se toma un puro de la caja
Aún con la humedad olorosa del cedro
En un sillón
La filosa hoja corta la cabeza
Un corte redondo, pequeño, perfecto.
Usted está sentado frente a sí mismo
Y huele el tabaco
Podrido tres veces por la fermentación
Blando y agrio
Lo muerde sin dañar la rubia capa
Y enciende la astilla
De la noble madera
Lo inclina un poco
Y deja que la llama
Queme el extremo opuesto
Ahora puede dar la primer chupada
Para que se instale
En su boca inundada
Todavía del último sorbo de ron
El humo abre paso
Déjelo que lo rodeé como una bruma
Déjelo que juegue formas
Y sueñe
Déjelo ir hasta el límite de su garganta
Déjelo que se lo lleve
Déjelo que se lleve su ansiedad
Déjelo que se lleve el arduo día
Déjelo.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Sabés que dejé de fumar en marzo de 2003.. Pero tu comentario es una tentación para romper el record.. De todos modos, prefiero esperar para encender uno despues de que podamos compartir un buen asado, cuando la mesa se despeje y la tranquilidad de la sobremesa inunde el ambiente.. o bien, en la playa, acompañado con una Caipira con Vodka...
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Me encanta la atmósfera de tu ritual, imagino disfrutar la compañia apenas de ese puro, aunque nunca fumé uno despiertas la tentacion......
BESO DE HUMO

Boris Padovan dijo...

Rituales mágicos. El puro y el ron.Sugiero un Cohiba Robusto y un excelente Zacapa de 21 años. Sublime. Un poema espléndido, con todos los sabores incorporados.