19 may 2024

CARTAS DE MI ABUELA, Leo Tuntisi

 

A través de la vida de mi abuela

podría contarse la historia de un siglo,

como bajo la luz parpadeante de un cinematógrafo onírico...

 

Buenos tiempos,

malos tiempos

y al final, Rosa sentada en su sillón

bajo la galería con vista al patio,

recordando...

 

Cuando mi abuela nació

todavía estaba en pie la piedra movediza.

 

Las calles de mi pueblo eran aún imaginarias

bajo una espesa niebla

y los ingleses se emborrachaban en el Hotel Londres.

 

Después, poco después

comenzaría a rodar el molino de la Historia,

entre acordes de un jazz frenético:

la revolución comunista

el crack de Wall Street

los dirigibles dominando el cielo

y Gardel cantaba en la radio

y el Toro salvaje de las pampas

sacaba de una piña a Dempsey fuera del ring.

 

Mientras tanto Rosa...

reía con esa risa que era como el cristal,

como el poema de Péret,

"Rosa espuma de mar hecha cristal"

y pasaban películas mudas como en un sueño

y las guerras eran como chaparrones de sangre y odio,

tan lejos...

 

Ya se apagaría en la radio la voz de los dictadores

mientras ella amasaba aquella pasta inolvidable

y cultivaba un rosal de rosas rojas, rosas, blancas, amarillas

y la radio anunciaba el Glostora Tango Club.

 

Cómo olvidar aquellos cuentos leídos en la cama,

aquella letra menuda de sus cartas con faltas de ortografía.

Cómo olvidar aquellos tazones de café con leche en el invierno,

cómo olvidar el pan, las nueces, los sueters tejidos a mano,

las sierras en el verano y su risa feliz…

 

Cómo olvidar el perfume incomparable de su rosal…

 

Cuando se fue...

fue como salir al camino bajo la lluvia,

sin tener a dónde ir.

 

Rosa espuma de mar,

Ross cristal,

fragilidad.

 

(*) Leandro Tuntisi, de revista Talismán, Poesía en la ciudad, Otoño de 2023, Venado Tuerto, Argentina.


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