1 jul 2007

Vasos Comunicantes

Cuando hayamos bebido
De la misma copa de vino
La clarividencia será un don
Las miradas tendrán
Otro misterio
Y otra claridad.

3 comentarios:

Ruth Hernández Boscán dijo...

salud señor!

hermoso poema

dos besos

Miguel Rodríguez dijo...

cuando haya pasado eso, si además fue pasada las 2:00 am...entonces seremos hermanos.

Miguel de la Cruz dijo...

Hola, Jorge. Hace bastante te envié un correo, luego te pedí respuesta y no sé qué pasó. Te pego un párrafo del i-mail en el que comentaba tus poemas. Miguel de la Cruz.
Ayer encontré tus poemas en el blog y los imprimí. Estoy leyéndolos y releyéndolos. Lo primero que me llamó la atención fue la coincidencia con dos imágenes que para mí crean como una morfología poética, imágenes que también están en mí como son la aguja, el ojal, el ojo de la cerradura. Son formas de la intimidad: eróticas, esquivas, espías, orgánicas, claroscuras.
Me tocaron, por un lado, los poemas breves, por su densidad en las situaciones compuestas por las tensiones materiales, corporales, que se funden en un forcejeo compacto. Los poemas largos tienden a ser narrativos, a veces el tema se sostiene en un elemento que va haciendo evolucionar la anécdota, como en el caso del revólver de "Seis balas". Este me pareció impecable, al igual que Quién y Días extraños con ese final memorable: "El mar es un murmullo de gente que enloquece".
Valoro de tus poemas los distintos tonos, esto me resulta fundamental en poesía. "Otro día", tiene esa descripción crepuscular de la que Georg Trakl hizo toda una poética. El día que desaparece como un vaso de agua y los distintas escenas que presiden ese verso final, tienen ensueño, otra condición para mí esencial que se va perdiendo, producto de que muchos poetas están condicionados por contingencias de actualidad y por modas.
Estoy leyendo el escrito de Concepción Bertone, una poeta que escuché en Rosario, de la que no tengo ningún libro, salvo los poemas que publicaste en tu blog y en algún Diario de Poesía.